Caracas, 29 ago.- El Consejo Nacional Electoral (CNE) de Venezuela, dominado por rectores afines al chavismo, llamó este viernes a la ciudadanía a alistarse en defensa del país ante las crecientes tensiones con Estados Unidos, que anunció el despliegue de embarcaciones militares en el mar Caribe bajo el argumento de reforzar la lucha contra el narcotráfico.
El vicepresidente del CNE, Carlos Quintero, aseguró que la situación demanda unidad frente a las presiones internacionales. “Llamamos a todas las venezolanas y a los venezolanos a que cuidemos el bien más preciado que tenemos, que es la paz. Nos encontramos en una nueva etapa y la única forma de que podamos mantener la paz es con la unidad nacional”, declaró durante una jornada de alistamiento realizada en Caracas, que se extenderá hasta el sábado.
A su lado, el presidente del organismo, Elvis Amoroso, reiteró el compromiso del ente electoral con la defensa del presidente Nicolás Maduro. “Como lo establece la Constitución, estamos obligados a defender la voluntad popular y a exigir respeto para el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro. Estamos aquí, rodilla en tierra, para defenderlo y para defender nuestra querida patria”, enfatizó.
La alcaldesa de Caracas, Carmen Meléndez, también participó en el acto, subrayando que el país enfrenta una ofensiva directa de Washington. “En estos momentos de amenazas, de agresiones, de todo lo que nos han hecho desde el imperio y los apátridas, aquí estamos los que amamos a la patria sin color político. Venezuela se respeta y se defiende”, afirmó.
Maduro busca respaldo internacional
En paralelo, el presidente Maduro informó que para esta nueva fase de alistamiento se habilitaron 945 puntos de registro de milicianos en todo el país, después de que el pasado fin de semana se realizara una primera jornada de inscripción. El mandatario también envió una carta al secretario general de la ONU, António Guterres, en la que solicitó su mediación para que Estados Unidos “cese sus acciones hostiles” contra Venezuela. En el documento, expresó su “profunda preocupación” por lo que calificó como una “escalada de agresiones” y pidió a la comunidad internacional que respalde el derecho de Caracas a la soberanía.
Contexto regional y reacción internacional
La Casa Blanca, por su parte, afirmó el jueves que numerosos países latinoamericanos respaldan la operación militar en el Caribe, que contempla el despliegue de buques de guerra e infantes de marina estadounidenses con el fin de cortar las rutas del narcotráfico. Según Washington, el Gobierno de Maduro estaría involucrado en estas actividades ilícitas, lo que justificaría la presión internacional.
Este nuevo pulso entre Caracas y Washington se suma a años de confrontación diplomática, sanciones económicas y acusaciones mutuas. Mientras el chavismo sostiene que Estados Unidos busca desestabilizar al país para forzar un cambio de régimen, las autoridades estadounidenses argumentan que el régimen de Maduro constituye una amenaza para la seguridad regional.
La convocatoria del CNE refuerza el discurso oficialista de que Venezuela enfrenta una “agresión imperial”, en un momento en que el país atraviesa una profunda crisis económica y social, marcada por la inflación, la migración masiva y el colapso de servicios básicos.