CIUDAD DE MÉXICO, 21 abr.- La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, reconoció este lunes que durante su llamada telefónica de la semana pasada con el presidente estadounidense, Donald Trump, no se logró un acuerdo para reducir los aranceles impuestos a productos mexicanos como el acero, el aluminio y vehículos automotores. Aunque calificó la conversación como “muy productiva”, admitió que las negociaciones continúan sin avances significativos.
El Contexto de la Negociación
En su conferencia matutina, Sheinbaum detalló que México ha planteado argumentos sólidos para eliminar los aranceles del 25 % que Trump mantiene sobre productos como acero y aluminio, así como sobre la industria automotriz. Estas tasas afectan directamente a las exportaciones mexicanas, pese a que otros productos cubiertos por el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) fueron eximidos de aranceles globales el pasado 2 de abril.
La presidenta destacó que México busca un trato similar para los metales y vehículos: “Nuestro planteamiento es, igual que en los otros casos, que en lo que entra por el tratado de libre comercio sea cero aranceles”. Asimismo, recordó a Trump que México tiene un déficit comercial en acero y aluminio con Estados Unidos, ya que importa más de lo que exporta, lo que debería ser considerado en las negociaciones.
Automotriz y Otros Conflictos Comerciales
En cuanto a la industria automotriz, Sheinbaum prefirió no adelantar detalles pero reiteró la postura de México sobre la importancia del T-MEC para los tres países involucrados. Su gobierno defiende las exportaciones mexicanas y subraya cómo el tratado comercial beneficia mutuamente a ambas naciones.
Además, durante la conversación con Trump, también se abordaron temas sensibles como los próximos aranceles del 21 % que Washington planea imponer al tomate mexicano debido a supuestas prácticas de dumping (venta a precios inferiores al costo real). Según Sheinbaum, México presentó sus argumentos para evitar estas medidas, aunque no ofreció precisiones adicionales.
Agua y Relaciones Binacionales
Otro punto clave discutido en la llamada fue el cumplimiento del Tratado de Aguas Binacional de 1944, después de que Texas acusara al Gobierno mexicano de incumplir con la entrega anual de agua conforme al acuerdo. Sheinbaum aseguró que México está comprometido con respetar este tratado y explicó la situación a Trump, aunque tampoco reveló detalles específicos de esta parte de la conversación.
Comunicación Continúa
A pesar de no haber alcanzado un consenso en estos temas, Sheinbaum afirmó que las líneas de comunicación siguen abiertas tanto a nivel presidencial como entre las secretarías pertinentes. Esto incluye diálogos entre la Secretaría de Economía de México y el Departamento de Comercio de EE.UU., quienes trabajan para resolver las diferencias comerciales pendientes.
Conclusión
La falta de avances en las negociaciones comerciales refleja la complejidad de las relaciones entre México y Estados Unidos bajo la administración Trump. Aunque ambos gobiernos reconocen la importancia del T-MEC y de una cooperación económica bilateral, persisten tensiones en sectores clave como el acero, el aluminio, la automotriz y los alimentos agrícolas.
Mientras México espera que Washington reconsidere sus políticas arancelarias, continuará defendiendo sus intereses comerciales y fortaleciendo los mecanismos de diálogo para resolver disputas sin afectar negativamente a las economías de ambos países. Este proceso será crucial para definir el futuro de las relaciones económicas entre dos socios estratégicos en América del Norte.
