Toronto, 15 sep. – Los pasajeros de Air Canada pueden respirar tranquilos después de que la aerolínea más grande de Canadá anunciara este domingo que llegó a un acuerdo tentativo con la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (ALPA), que representa a más de 5.200 pilotos. Este acuerdo preliminar se alcanzó apenas unos días antes de un posible paro laboral que podría haber afectado tanto a Air Canada como a su filial Air Canada Rouge.
El acuerdo evita una huelga que estaba prevista para comenzar este miércoles, lo que hubiera generado importantes cancelaciones de vuelos. Según el comunicado emitido por la aerolínea poco después de la medianoche, ambas compañías continuarán operando normalmente mientras los miembros del sindicato votan el contrato tentativo de cuatro años.
Reconocimiento a los pilotos y crecimiento futuro
Air Canada destacó que el nuevo acuerdo reconoce el profesionalismo y las contribuciones de sus pilotos, a la vez que ofrece un marco para el crecimiento de la aerolínea. Aunque los términos exactos del contrato se mantendrán confidenciales hasta la votación de ratificación, ALPA aseguró que el acuerdo podría generar un valor adicional de aproximadamente 1.9 mil millones de dólares para los pilotos durante la vigencia del mismo.
Charlene Hudy, primera oficial y presidenta del Comité Ejecutivo de Operaciones de ALPA de Air Canada, afirmó que la “determinación unificada de los pilotos” fue clave para lograr este contrato, que incluye mejoras significativas en áreas como la remuneración, la jubilación y las normas laborales.
Impacto en los pasajeros
En previsión del paro, algunos pasajeros ya habían cambiado sus vuelos, pero ahora Air Canada les permitirá regresar a sus itinerarios originales sin costo adicional, siempre que haya espacio disponible. La aerolínea había advertido previamente sobre la posibilidad de implementar un plan de reducción de vuelos si se emitía un aviso de huelga o cierre patronal.
Disputas salariales y ganancias récord
Uno de los puntos más conflictivos en las negociaciones fue el salario, tema en el que ambas partes parecían estar muy distanciadas. El sindicato de pilotos acusó a la aerolínea de obtener ganancias récord mientras ofrecía una compensación inferior a la del mercado. Según ALPA, aproximadamente una cuarta parte de los pilotos ha aceptado un segundo empleo, con el 80% de ellos haciéndolo por necesidad.
Air Canada, por su parte, había propuesto aumentos salariales de más del 30% en cuatro años, además de mejoras en los beneficios, y calificó las demandas salariales del sindicato como “irrazonables”.
Presión gubernamental y empresarial
El conflicto también atrajo la atención de grupos empresariales y políticos. Organizaciones como la Federación Canadiense de Empresas Independientes y las Cámaras de Comercio de Canadá y Estados Unidos habían pedido al gobierno intervenir para evitar una interrupción laboral que pudiera afectar negativamente los viajes y el comercio transfronterizo.
Sin embargo, el primer ministro Justin Trudeau dejó claro que el gobierno no se involucraría en el proceso de negociación, a menos que quedara evidente que no se podía alcanzar un acuerdo negociado. Trudeau afirmó que el gobierno respeta el derecho a huelga y solo intervendría en circunstancias extremas.
El futuro de Air Canada
Este acuerdo tentativo llega en un momento crucial para Air Canada, que ya había comenzado a prepararse para un posible cierre. Con este nuevo contrato, la aerolínea evita la interrupción de sus 670 vuelos diarios y garantiza el transporte de más de 110.000 pasajeros en medio de la alta demanda de viajes.
