Chicago, 21 ago. — En una emotiva aparición en la Convención Nacional Demócrata, el exmandatario Barack Obama instó a Estados Unidos a abrir un “nuevo capítulo” y apoyar a la vicepresidenta Kamala Harris en su camino hacia la Casa Blanca. El discurso de Obama, pronunciado en el estadio United Center de Chicago, fue recibido con una estruendosa ovación por parte del público, que recordó la energía de la campaña presidencial de Obama en 2008.
Obama, conocido por su habilidad para inspirar y movilizar a las masas, se dirigió al público con un fervor que evocó los días de su propia campaña. Utilizó el lema “¡Sí, se puede!” y recordó el espíritu de “esperanza” y “cambio” que marcó su presidencia. En un tono firme y enérgico, el expresidente criticó duramente al expresidente Donald Trump, describiéndolo como un multimillonario egoísta que usa el poder para sus propios fines y recurre a “teorías conspirativas locas” y “apodos infantiles” para desviar la atención de su mayor miedo: perder ante Harris en las próximas elecciones.
Obama no escatimó en ataques personales, burlándose de la “extraña obsesión” de Trump con el tamaño de las multitudes, un comentario que generó risas y aplausos en el estadio. El exmandatario también defendió a Harris, argumentando que Estados Unidos está listo para un cambio significativo. “No necesitamos cuatro años más de fanfarronería y caos. Hemos visto esa película y sabemos que la segunda parte siempre es peor. Estamos listos para una presidenta Kamala Harris”, clamó.
En su discurso, Obama pintó un retrato de un Estados Unidos que busca “libertad” y “oportunidades” para todos, sin importar su origen. Habló sobre la necesidad de una sociedad que trabaje junta y se cuide mutuamente, y reflexionó sobre una cultura que ha permitido la ascensión de Trump. “Perseguimos la aprobación de extraños en nuestros teléfonos y construimos muros a nuestro alrededor, preguntándonos por qué nos sentimos tan solos”, dijo.
A pesar de los momentos de crítica, Obama también ofreció toques de humor, destacando al gobernador de Minesota, Tim Walz, como un político auténtico. “Me encanta este tipo”, dijo Obama, provocando carcajadas entre el público.
El vínculo entre Obama y Harris data de hace 20 años, cuando Harris organizó una recaudación de fondos para la campaña senatorial de Obama en San Francisco. Años después, Harris trabajó como voluntaria en la campaña presidencial de Obama en 2008. En su discurso, Obama recordó estos momentos compartidos y reiteró su apoyo incondicional a Harris para que pueda hacer historia como la primera mujer, afroamericana y persona de origen indio en ser elegida presidenta de Estados Unidos.
El entusiasmo del público durante el discurso de Obama fue tan grande que, en algunos momentos, su voz se perdió entre los vítores. El exmandatario concluyó su discurso con un llamado a la acción: “¡Ahora, pongámonos a trabajar!”.
