QUITO, 13 Mayo.- Siete presuntos delincuentes y un policía fallecieron el martes durante un enfrentamiento armado ocurrido en el marco de un operativo para liberar a una persona secuestrada horas antes, informó la policía ecuatoriana.
El operativo se inició la noche del lunes cuando las autoridades recibieron información sobre un secuestro ocurrido en la población de Pedro Carbo, en la provincia de Guayas. Al llegar al sector Los Ceibos, cerca de Santa Elena —a 341 kilómetros al suroeste de Quito—, los uniformados fueron emboscados por un grupo armado ilegal que respondió con disparos.
“En uso legítimo de la fuerza se abatieron a siete delincuentes”, señaló la policía en un comunicado oficial, en el que también identificó al agente caído como Danny Chaguaro. Durante la operación, las autoridades lograron detener a un presunto integrante del grupo criminal conocido como Los Lobos y confiscaron cinco armas de fuego.
La víctima del secuestro, cuya identidad no fue revelada, fue rescatada con vida tras la intervención policial. Según las autoridades, había sido retenida el mismo lunes por un grupo armado en Pedro Carbo, localidad ubicada en la vecina provincia de Guayas.
Ola de Violencia Criminal en Ecuador
Este incidente refleja la creciente ola de violencia criminal que afecta al país andino, donde los secuestros extorsivos y las extorsiones han proliferado en los últimos años. Según cifras oficiales, solo el año pasado se registraron 3.292 casos de secuestros extorsivos, especialmente en las provincias de Guayas —cuya capital es Guayaquil— y Pichincha, donde se encuentra Quito.
Para combatir esta situación, el presidente Daniel Noboa declaró en enero de 2024 el estado de conflicto armado interno, una medida que ha permitido la acción conjunta de policías y militares en labores de seguridad. Este enfoque busca desarticular grupos criminales organizados que han sembrado el terror en varias regiones del país.
Impacto Social y Medidas de Seguridad
El enfrentamiento ocurrido en Los Ceibos pone de manifiesto los riesgos que enfrentan los agentes de seguridad en su lucha contra el crimen organizado. La muerte del policía Danny Chaguaro ha generado consternación entre sus compañeros y la ciudadanía, quienes exigen mayores recursos y estrategias efectivas para proteger tanto a las fuerzas del orden como a la población civil.
Mientras tanto, las autoridades continúan trabajando para desmantelar a Los Lobos y otros grupos armados ilegales responsables de actividades delictivas como secuestros, extorsiones y tráfico de drogas. El caso de este operativo subraya la importancia de fortalecer la coordinación entre las fuerzas de seguridad y las comunidades para prevenir futuros incidentes.
Queda por verse si las medidas adoptadas bajo el estado de excepción lograrán reducir significativamente los índices de violencia en el país, pero lo cierto es que la lucha contra el crimen organizado sigue siendo una prioridad crítica para el gobierno ecuatoriano.
