CIUDAD DE MÉXICO, 25 de abril.- La presidenta mexicana, Claudia Sheinbaum, destacó este viernes que en México también residen cerca de 1.5 millones de estadounidenses en situación irregular, aunque aseguró que “aquí se les recibe con cariño”. Sus declaraciones surgieron en el contexto de la defensa de los migrantes mexicanos en Estados Unidos, incluidos los aproximadamente 5 millones de indocumentados, frente a las amenazas de deportaciones masivas prometidas por el presidente estadounidense, Donald Trump.

“Muchos (estadounidenses en el país) tampoco tienen documentos, vienen aquí y se quedan, y de muchos niveles económicos, de una diversidad muy grande, sobre todo jóvenes, vienen a México, no solo a la Ciudad de México, sino a muchos estados de la república porque muchos trabajan a distancia”, explicó Sheinbaum durante su conferencia matutina.

La mandataria subrayó que México es un lugar atractivo para vivir, tanto para los estadounidenses como para otros extranjeros. “Entonces, México es un lugar maravilloso para vivir, vienen a México, aquí se les recibe con cariño y desde aquí trabajan”, afirmó.


El Fenómeno de los Nómadas Digitales

En los últimos años, estados del norte como Sonora, Sinaloa y Baja California Sur han sido destinos populares para ciudadanos estadounidenses. Además, la capital mexicana ha visto un aumento significativo de “nómadas digitales”, principalmente en barrios como Roma, Condesa, Juárez y Cuauhtémoc, donde estos extranjeros han establecido residencias temporales o permanentes aprovechando la conectividad y el menor costo de vida.

Sin embargo, la presencia de estadounidenses en México no está exenta de polémica. En ciudades como Ciudad de México y Oaxaca, algunos residentes acusan a los extranjeros de agudizar la gentrificación, aumentar los precios de vivienda y alterar dinámicas culturales locales. Esta semana, una protesta en Mazatlán, Sinaloa, puso de relieve estas tensiones cuando un estadounidense prohibió a un trabajador local comer en la acera frente a su casa.

Ante esta situación, Sheinbaum fue enfática: “Quien viene a visitar tiene que respetar a las y los mexicanos”. Y agregó: “A México y a los mexicanos se nos respeta, y actitudes racistas, clasistas, no son aceptadas en México”.


Preocupación por las Deportaciones Masivas

Las deportaciones masivas prometidas por Trump preocupan profundamente al gobierno mexicano, ya que los mexicanos representan casi la mitad de los 11 millones de indocumentados en Estados Unidos. Además, las remesas enviadas por estos migrantes son vitales para la economía nacional, representando casi el 4% del Producto Interno Bruto (PIB) de México. En 2024, el país recibió un récord de casi 65,000 millones de dólares en remesas.

Sheinbaum adelantó que el lunes presentará un nuevo informe elaborado por el centro de investigación Latino Donor Collaborative (LDC), que calcula el valor económico aportado por los mexicanos en Estados Unidos, tanto migrantes como nacidos allá. Según datos previos del LDC, esta contribución asciende a 2.06 billones de dólares, equivalente a casi el 10% de la economía estadounidense.


Un Mensaje de Reciprocidad y Respeto

La presidenta mexicana aprovechó sus declaraciones para enviar un mensaje claro sobre reciprocidad y respeto mutuo entre ambos países. Mientras defiende a los mexicanos que buscan mejores oportunidades en Estados Unidos, también reconoce la importancia de garantizar que los extranjeros en México sean bienvenidos siempre que respeten las normas y tradiciones locales.

“A México y a los mexicanos se nos respeta”, reiteró Sheinbaum, dejando claro que cualquier actitud discriminatoria o despectiva hacia los habitantes locales será rechazada.

Con esta postura, Sheinbaum busca equilibrar la relación bilateral mientras enfrenta los desafíos migratorios y económicos que podrían derivarse de las políticas de Trump.

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