Wuhan, 23 ene. A cinco años del estallido de la pandemia de covid-19, el mundo aún carece de respuestas definitivas sobre su origen. Mientras la Organización Mundial de la Salud (OMS) insiste en solicitar más transparencia a China, Pekín afirma haber entregado toda la información disponible.

Wuhan: el epicentro de los primeros casos

En diciembre de 2019, Wuhan, una ciudad de más de 11 millones de habitantes, reportó los primeros casos de lo que en ese entonces se conoció como un “brote misterioso de neumonía”. Poco después, en enero de 2020, se impuso un estricto confinamiento de más de dos meses para frenar la propagación de un virus que la OMS estima dejó cerca de 800 millones de infecciones y 7 millones de muertes a nivel mundial.

Aunque la vida en Wuhan ha regresado a la normalidad, el recuerdo de aquellos días permanece vivo para muchos residentes. Chu Jing, una habitante de la ciudad, comenta: «Es bueno recordar lo que vivimos, aunque muchos prefieran olvidar».

Por su parte, Liu Xuan rememora los primeros días de incertidumbre: «Las calles estaban vacías, no había camas en los hospitales ni comida en los supermercados. La ciudad fue confinada de un día para otro y no sabíamos qué hacer».

El origen incierto y el mercado de Huanan

El mercado de Huanan, señalado en su momento como el posible punto de origen del virus, permanece sellado y custodiado por guardias de seguridad. Este emblemático lugar, cerrado desde enero de 2020, era conocido por ofrecer una gran variedad de productos, desde alimentos frescos hasta animales exóticos como faisanes y serpientes, lo que despertó sospechas de que ciertos murciélagos o pangolines podrían haber actuado como transmisores del virus.

Sin embargo, la OMS afirma que no se han encontrado pruebas concluyentes de que el virus haya sido transmitido por animales del mercado. Maria Van Kherkove, responsable técnica de la lucha contra la pandemia en la OMS, subraya la necesidad de obtener más información, incluyendo datos genéticos y moleculares recolectados en el lugar.

La hipótesis del laboratorio y el Instituto de Virología

Entre las teorías que aún persisten está la posibilidad de que el virus haya escapado de manera accidental de un laboratorio en Wuhan. Aunque la OMS ha calificado esta hipótesis como “poco probable”, no la ha descartado por completo. Investigadores internacionales siguen solicitando acceso a datos sobre las primeras infecciones y los trabajos realizados en el Instituto de Virología de Wuhan.

La postura de China

China asegura haber cooperado plenamente con las investigaciones internacionales. Mao Ning, portavoz de la Cancillería china, declaró recientemente: «Los expertos de la OMS visitaron todos los lugares que solicitaron, conocieron a las personas que querían conocer y revisaron todos los materiales que pidieron».

A pesar de estas afirmaciones, la OMS insiste en la necesidad de mayor colaboración para esclarecer el origen del virus. Tedros Adhanom Ghebreyesus, director general de la OMS, advierte que, sin datos completos, todas las hipótesis “permanecen sobre la mesa”.

Un enigma sin resolver

Cinco años después, el origen de la covid-19 sigue siendo una de las mayores incógnitas científicas de nuestro tiempo. Mientras el mundo busca respuestas, el recuerdo de los primeros días de la pandemia en Wuhan sirve como un recordatorio de los desafíos que la humanidad enfrentó y sigue enfrentando frente a este virus.

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