Londres, 28 Sep.- La actriz británica Maggie Smith, reconocida por sus memorables papeles en las películas de Harry Potter y en la serie Downton Abbey, ha fallecido a los 89 años, según anunció su familia el viernes 27 de septiembre de 2024.
En un emotivo comunicado, sus hijos, Toby Stephens y Chris Larkin, confirmaron que su madre “falleció pacíficamente” en el hospital en la mañana del mismo día. “Con gran tristeza tenemos que anunciar la muerte de la dama Maggie Smith”, expresaron, refiriéndose a ella por el título de “Dame” que le fue otorgado por la reina Isabel II en 1990, un reconocimiento que es el equivalente femenino al de “Sir”.
El comunicado detalla que Smith “era una persona muy reservada” y que sus amigos y familiares la acompañaron en sus últimos momentos. Deja atrás dos hijos y cinco nietos que están devastados por la pérdida de su querida madre y abuela. Además, la familia agradeció al personal del Hospital Chelsea y Westminster por su atención y generosidad durante sus últimos días, y pidió respeto por su privacidad.
Una carrera brillante
Maggie Smith nació en 1934 en el este de Londres y se convirtió en una leyenda del cine, teatro y televisión británicos. A lo largo de su carrera, que abarcó más de seis décadas desde su debut en 1952, ganó dos premios Oscar por The Prime of Miss Jean Brodie en 1970 y California Suite en 1979. Su versatilidad le permitió brillar en una amplia gama de roles, siendo especialmente conocida por su talento en la comedia.
En años recientes, alcanzó una nueva generación de fanáticos gracias a su papel de Minerva McGonagall en la exitosa saga de Harry Potter, un personaje que la autora J.K. Rowling quería que fuera interpretado por ella. La diversidad de su carrera incluye papeles destacados como la madre superiora en Cambio de Hábito (1992) junto a Whoopi Goldberg, una mujer neurótica en Una habitación con vistas (1986) y una anciana sin hogar en The Lady in the Van (2015).
Su popularidad alcanzó nuevas alturas con su interpretación de la condesa viuda Violet en Downton Abbey, que se emitió entre septiembre de 2010 y diciembre de 2015. La serie le otorgó un nivel de reconocimiento que, según declaró en 2017, transformó su vida diaria, haciendo que ya no pudiera salir sin ser reconocida.
“Es ridículo: llevaba una vida perfectamente normal hasta Downton Abbey. Acudía a teatros, a galerías y otros lugares sin problema. Y ahora no puedo”, comentó, reflejando el impacto que tuvo el éxito de la serie en su vida. Su legado perdurará no solo en su extensa filmografía, sino también en el corazón de quienes disfrutaron de su arte.
