El ultranacionalista FPÖ cierra su campaña con expectativas de liderar el gobierno en Austria

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Viena, 28 sep.- El Partido de la Libertad de Austria (FPÖ), de orientación ultranacionalista, concluyó este viernes su campaña electoral con la firme convicción de que el domingo se alzará como la fuerza política dominante en las elecciones legislativas y que logrará marcar un nuevo rumbo para el país.

«Esta vez lo conseguiremos. Vamos a ocupar el primer puesto y allanaremos el camino hacia la cancillería federal», declaró el líder del FPÖ, Herbert Kickl, durante un multitudinario mitin en la Plaza de San Esteban, frente a la icónica catedral de Viena.

El evento estuvo rodeado por un fuerte dispositivo de seguridad, con agentes y vallas que separaban a los simpatizantes del FPÖ de manifestantes opositores que coreaban «¡nazis fuera!», en señal de rechazo a la ideología del partido, cuya fundación en 1955 estuvo ligada a exoficiales nazis.

Confianza en los sondeos

La confianza de Kickl se ve respaldada por las encuestas, que sitúan al FPÖ, uno de los partidos de extrema derecha más antiguos de Europa, con un apoyo del 26 al 28 % del electorado. Esto lo coloca ligeramente por delante del Partido Popular Austríaco (ÖVP), liderado por el actual canciller Karl Nehammer, que ronda el 25 % en los sondeos.

Aunque el FPÖ mantiene una leve ventaja, los analistas advierten que la distancia entre ambos partidos se ha acortado en los últimos días, lo que podría llevar a un resultado más ajustado de lo previsto inicialmente.

En su discurso, Kickl reiteró sus promesas clave: frenar la inmigración, eliminar las ayudas estatales a los extranjeros y «proteger» a la población austríaca. «Estamos aquí para proteger a los correctos, y esos son los propios ciudadanos», declaró ante una multitud que agitaba banderas austríacas y globos azules, el color característico del FPÖ.

Promesas electorales y mensaje antisistema

El líder del FPÖ también se comprometió a defender la propiedad privada, evitar subidas de impuestos, y aseguró que incluirá en la Constitución que «solo existen dos géneros, hombre y mujer». Además, prometió restablecer la disciplina en las escuelas y criticó duramente a la Unión Europea (UE) por su apoyo a Ucrania, argumentando que esto fomenta la guerra.

«Nada de lo que digo es extrema derecha. Es completamente normal», afirmó Kickl, quien ocupó el cargo de ministro del Interior en el gobierno de coalición con los conservadores de Sebastian Kurz, que colapsó en 2019 tras un escándalo de corrupción.

Kickl se presentó como el único candidato verdaderamente antisistema y capaz de escuchar la voluntad popular, en contraste con lo que describió como la incompetencia de los partidos del gobierno.

Posible exclusión del próximo gobierno

A pesar del optimismo de Kickl, la posibilidad de que el FPÖ integre el próximo gobierno sigue siendo incierta. Incluso si el partido obtiene la mayoría de votos, no alcanzará la mayoría absoluta, y casi todos los partidos políticos han descartado formar una coalición con los ultranacionalistas.

El ÖVP, aunque ha dejado abierta la posibilidad de una alianza con el FPÖ, ha dejado claro que esto solo ocurriría si Herbert Kickl no lidera la formación.

La campaña electoral en Austria concluirá mañana con un mitin del Partido Socialdemócrata (SPÖ), que se encuentra en tercer lugar en intención de voto con cerca del 20 %, según las encuestas más recientes.

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