NACIONES UNIDAS, 25 de septiembre de 2024.- El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, anunció hoy una nueva inversión de 685 millones de dólares para ayudar a los países de Latinoamérica y el Caribe a acoger a los migrantes que transitan por sus territorios. Esta decisión fue revelada durante una reunión de cancilleres en el marco de la Declaración de Los Ángeles, una iniciativa lanzada por Estados Unidos para abordar los flujos migratorios regionales, que tuvo lugar en Nueva York en el contexto de la Asamblea General de la ONU.

Blinken especificó que estos nuevos fondos se desglosan en 369 millones de dólares destinados a apoyar a refugiados y migrantes vulnerables en sus países de acogida, así como 228 millones de dólares en asistencia alimentaria para los venezolanos desplazados en Colombia, Ecuador y Perú. Además, se destinarán 10 millones de dólares para un programa del Banco Mundial que fomenta el desarrollo económico para los refugiados y sus comunidades receptoras.

Con esta aportación, el total invertido por Estados Unidos en 2024 supera los 1.200 millones de dólares, en el marco de la Declaración de Los Ángeles, que fue firmada en 2022 por una veintena de países comprometidos a colaborar para frenar la migración irregular y expandir las vías legales para los migrantes.

Blinken también anunció la creación de un nuevo secretariado, que será presidido de forma rotatoria por Colombia, y que se encargará de establecer las prioridades de la Declaración de Los Ángeles para el año 2025. “Estoy seguro de que juntos podemos avanzar hacia un continente donde la migración sea una opción libre y legítima, donde todas las personas puedan vivir con seguridad, dignidad y oportunidades”, concluyó Blinken.

Durante la reunión, el canciller colombiano, Luis Gilberto Murillo, destacó la importancia de esta nueva estructura para avanzar en la institucionalización de la Declaración de Los Ángeles. Murillo informó que Colombia ha acogido a casi tres millones de venezolanos, de los cuales 2,5 millones ya han sido regularizados, y que ha destinado el 1% del PIB a atender a los migrantes. Sin embargo, también enfatizó que Colombia es un país de tránsito para personas de diversas nacionalidades y que se necesita más colaboración con otros países para abordar esta problemática de manera efectiva.

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