Miami, EE.UU., 16 sep. – El expresidente estadounidense Donald Trump sufrió este domingo un nuevo intento de asesinato mientras jugaba al golf en el Trump International Golf Club de West Palm Beach, Florida. Un hombre armado con un rifle AK-47 con mira telescópica fue detenido por el Servicio Secreto antes de que lograra disparar, en un incidente que está siendo investigado como un aparente “intento de asesinato” por el FBI.
El incidente ocurrió a las 13:30 (17:30 GMT), cuando agentes del Servicio Secreto detectaron a un individuo sospechoso oculto en los arbustos cercanos al campo de golf, aproximadamente a 300-500 metros de donde se encontraba Trump. Tras avistar al hombre armado, los agentes abrieron fuego, provocando que el sospechoso huyera hacia una camioneta negra en la que intentó escapar. Un testigo clave logró fotografiar la matrícula del vehículo, lo que permitió la captura del sospechoso poco después en una carretera cercana.
Las autoridades encontraron el rifle, dos mochilas y una cámara GoPro en los arbustos donde se ocultaba el atacante. Aunque la identidad del sospechoso no ha sido revelada oficialmente, algunos medios, como Fox News y el New York Post, lo han identificado como Ryan Wesley Routh.
El propio Trump, tras el incidente, aseguró a través de un comunicado: “Hubo disparos cerca de mí, pero estoy a salvo y bien. ¡Nada me detendrá, nunca me rendiré!”. El expresidente republicano, quien busca regresar a la Casa Blanca en 2024, permaneció ileso y en buen estado de ánimo, según fuentes cercanas.
Respuesta de las Autoridades y del Servicio Secreto
El sheriff Ric Bradshaw, en una conferencia de prensa realizada horas después, ofreció detalles adicionales sobre el incidente, subrayando que la seguridad en torno a Trump se ha reforzado tras un ataque anterior ocurrido en julio. En ese suceso, Trump resultó herido en la oreja derecha durante un mitin en Pensilvania, lo que provocó cambios significativos en los protocolos de seguridad, incluyendo el uso de pantallas de vidrio blindado en sus apariciones públicas.
La Casa Blanca, a través de un comunicado, confirmó que tanto el presidente Joe Biden como la vicepresidenta Kamala Harris fueron informados sobre el intento de asesinato. Harris expresó su alivio de que Trump estuviera a salvo y reiteró que “la violencia no tiene cabida en Estados Unidos”. Por su parte, J.D. Vance, compañero de fórmula de Trump, compartió que había hablado con él poco después del incidente y que se encontraba de buen ánimo.
Este intento de asesinato marca otro inquietante capítulo en la campaña presidencial de Trump, quien ha sido objeto de varios ataques y amenazas desde su salida de la Casa Blanca en 2021. Las investigaciones continúan, mientras que el Servicio Secreto evalúa nuevas medidas para reforzar la seguridad en los eventos públicos del expresidente.
