Jerusalén, 11 ago. — La organización islamista Hamás ha anunciado que no participará en la reunión programada para el martes, destinada a negociar un alto el fuego en Gaza con Israel, la cual iba a celebrarse en El Cairo o Doha. En un comunicado, Hamás ha instado a implementar los acuerdos previos en lugar de continuar con nuevas rondas de negociaciones.
Hamás ha pedido a los mediadores —Egipto, Catar y Estados Unidos— que exijan a Israel cumplir con lo acordado el pasado 2 de julio. Sin proporcionar detalles específicos, la organización afirmó que las nuevas propuestas de Israel en las negociaciones “dan cobertura” a la ofensiva israelí en Gaza y le “conceden tiempo” para continuarla.
La decisión de Hamás de retirarse de las negociaciones se produce después del bombardeo israelí contra la escuela Al Tabaín en Ciudad de Gaza el sábado, en el que murieron al menos 93 palestinos, un ataque que Hamás ha calificado como una “masacre”. Además, la muerte del líder político de Hamás, Ismail Haniyeh, en un ataque en Teherán, del cual Israel no ha reivindicado ni desmentido su autoría, ha agravado la situación.
En el comunicado, Hamás recordó que aceptó la propuesta de los mediadores el 6 de mayo de 2024, durante una ronda de negociaciones que resultó fallida. Asimismo, mencionó que acogió con satisfacción el anuncio del presidente estadounidense Joe Biden el 31 de mayo de 2024 y la Resolución 2735 del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas sobre la propuesta actual que está en discusión. No obstante, Hamás denunció que Israel respondió con rechazo y continuó las “masacres” contra el pueblo palestino.
Osama Hamdan, portavoz de Hamás, reiteró en una entrevista con la cadena libanesa Al Manar que su grupo espera que se implementen sus demandas antes de considerar un alto el fuego. Estas demandas incluyen el cese de la guerra, la retirada del Ejército israelí de la Franja de Gaza, la entrada de ayuda humanitaria y el inicio de la reconstrucción de la región.
El cese de la guerra en Gaza ha sido un punto crítico en las negociaciones desde el principio. Mientras Hamás lo considera indispensable, Israel se niega a aceptarlo hasta que logre desmantelar completamente las capacidades militares y políticas de los islamistas y garantizar el retorno de los 111 rehenes que aún permanecen en la Franja.
