Kamala Harris acorta la ventaja de Trump en estados clave del sur y suroeste, generando nerviosismo en la campaña republicana

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Washington, 8 de agosto.- La carrera presidencial en Estados Unidos se está volviendo cada vez más competitiva, especialmente en los estados del sur y suroeste, donde la candidata demócrata Kamala Harris ha logrado reducir significativamente la ventaja de su rival republicano, Donald Trump. Esta zona, que antes parecía segura para los conservadores, se ha convertido en un campo de batalla crucial tras la renuncia del presidente Joe Biden a buscar la reelección.

Tradicionalmente, estados como Nevada, Arizona y Georgia han sido baluartes republicanos, con Trump manteniendo amplias ventajas en las encuestas de intención de voto. Sin embargo, en las últimas semanas, esas ventajas se han desvanecido, lo que ha provocado una creciente preocupación en la campaña de Trump. Tanto es así que el expresidente ha convocado una inesperada rueda de prensa para hoy en su residencia de Mar-a-Lago, un movimiento que muchos interpretan como una señal de alarma dentro de su equipo.

El influyente centro de análisis electoral Cook Political Report anunció este jueves un cambio significativo en su proyección para estos tres estados, los cuales han pasado de estar “inclinados hacia los republicanos” a un estatus de “empate”. Este ajuste es visto como un reconocimiento del impacto que ha tenido en la campaña demócrata la confirmación de la candidatura de Kamala Harris y su compañero de fórmula, el gobernador de Minesota, Tim Walz.

Las cifras respaldan este cambio en el panorama electoral. En Arizona, la media de encuestas de FiveThirtyEight muestra que la ventaja de Trump, que era de más de dos puntos, se ha reducido a solo un punto. RealClearPolitics (RCP) refleja una tendencia similar, con la ventaja del republicano cayendo de cinco a casi tres puntos en el mismo estado.

Nevada, que los demócratas consideraban prácticamente perdido, ahora se encuentra en un empate técnico según los últimos sondeos. La media de encuestas de RCP todavía otorga a Trump una ventaja de cuatro puntos, pero esto es una reducción frente a los cinco puntos que tenía sobre Biden hace apenas un mes.

En Georgia, otro estado crucial, la ventaja de Trump en las encuestas ha desaparecido por completo, dejando a Harris en empate técnico y con una tendencia ascendente. Este cambio es especialmente preocupante para los republicanos, quienes ya enfrentan desafíos en otros estados clave del Medio Oeste.

La respuesta de Trump a estos desarrollos ha sido rápida y contundente. Stephanie Grisham, ex portavoz de Trump durante su presidencia, señaló en redes sociales que la convocatoria de la rueda de prensa en Mar-a-Lago es un claro indicio de que el expresidente está “entrando en pánico”. Según Grisham, Trump cree que su equipo no está a la altura y que solo él puede salvar su campaña. “Odia la cobertura que está recibiendo Harris”, añadió.

La gira de campaña de Harris y Walz, que comenzó el martes, ha sido un éxito rotundo, atrayendo a más de 10.000 personas en cada presentación y llenando las instalaciones en cada estado clave que visitan. Aquellos cercanos a Trump han señalado que la capacidad de sus rivales para atraer grandes multitudes es una de las métricas que más le preocupa al expresidente.

A medida que la contienda se intensifica, queda claro que la elección de 2024 será una de las más reñidas en la historia reciente de Estados Unidos, con el sur y suroeste desempeñando un papel decisivo en el desenlace.

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