Lima, 21 Oct.- El Tribunal Constitucional de Perú (TC) ordenó este lunes dejar “sin efecto” la acusación fiscal contra la líder política Keiko Fujimori y su partido Fuerza Popular, al determinar que el proceso judicial por la presunta financiación irregular de sus campañas electorales de 2011 y 2016 “carece de sustento jurídico”.
La sentencia, aprobada por cinco de los siete magistrados del TC, declaró fundada la demanda de amparo presentada por la defensa de la hija del expresidente Alberto Fujimori (1990-2000), y ordenó al Décimo Juzgado de Investigación Preparatoria Nacional archivar el conocido “caso cócteles”.
Argumentos del fallo constitucional
El Tribunal precisó que su decisión no implica una declaración de inocencia o culpabilidad, sino la constatación de que “no existen bases legales para continuar con una imputación carente de sustento jurídico y contraria a la Constitución”.
La abogada de Fujimori, Giulliana Loza, había argumentado que antes de noviembre de 2016 no se consideraba delito el financiamiento de campañas políticas mediante aportes privados, por lo que —sostuvo— la Fiscalía violó el derecho a la defensa al incorporar nuevas acusaciones en 2018.
Sin embargo, la presidenta del TC, Luz Pacheco, emitió un voto en contra del fallo, considerando que el juez constitucional no debe pronunciarse sobre la calificación penal de una conducta, por lo que la demanda de Loza debía ser declarada improcedente.
El origen del “caso cócteles”
El proceso judicial conocido como “caso cócteles” surgió en 2017, cuando la Fiscalía acusó a Fujimori y a dirigentes de Fuerza Popular de haber recibido aportes ilegales de empresas privadas, entre ellas la constructora Odebrecht, para financiar las campañas presidenciales de 2011 y 2016.
Según la investigación, dichos aportes fueron disfrazados como donaciones en eventos sociales denominados “cócteles”, lo que llevó a la Fiscalía a sostener que el partido operaba como una “organización criminal” y a pedir su disolución.
En julio pasado, el equipo fiscal del caso Lava Jato había ampliado a 35 años el pedido de prisión para Keiko Fujimori, tras presentar una nueva acusación penal luego de que el juicio oral fuera anulado en abril de 2024. El TC había señalado entonces que existían vicios procesales en el auto de enjuiciamiento, lo que hizo insostenible la continuidad del proceso.
Reacciones y futuro político
Horas después del fallo, Keiko Fujimori celebró la decisión del Tribunal Constitucional y afirmó que “la justicia tarda, pero llega”, aunque evitó confirmar si será candidata en las elecciones presidenciales de 2026.
“En pocos días, junto con mis hijas, tomaré una decisión y haré el anuncio correspondiente”, declaró Fujimori en conferencia de prensa. La líder de Fuerza Popular, derrotada en las tres últimas segundas vueltas frente a Ollanta Humala (2011), Pedro Pablo Kuczynski (2016) y Pedro Castillo (2021), sostuvo que tras una década de “acusaciones injustas”, el fallo representa un “paso hacia la reconciliación nacional”.
Finalmente, Fujimori señaló que el principal clamor del pueblo peruano es la seguridad, y reafirmó que su partido participará en los comicios generales de 2026.








