Albany, Nueva York, 9 Sep.- Un total de 57 personas que se encontraban ilegalmente en Estados Unidos fueron detenidas la semana pasada durante una redada en la planta de Nutrition Bar Confectioners, ubicada en la zona rural de Cato, Nueva York, según informó el fiscal federal interino John Sarcone.
De los detenidos, cinco enfrentan cargos penales por reingreso sin autorización, mientras que los 52 restantes permanecen a la espera de procedimientos de deportación. La mayoría de los trabajadores provienen de Guatemala, según indicó el grupo de defensa Rural and Migrant Ministry.
La redada se realizó el jueves pasado, el mismo día en que 475 personas fueron detenidas en otra planta en Georgia, donde el fabricante de automóviles Hyundai produce vehículos eléctricos. Sarcone advirtió que las investigaciones continúan y que los empleadores pueden esperar más acciones de cumplimiento de la ley de inmigración en el lugar de trabajo.
“Proseguiremos agresivamente las investigaciones penales contra aquellos que violen nuestras leyes empleando a no ciudadanos sin autorización. Habrá consecuencias. Los malos tiempos de hacer la vista gorda han terminado”, afirmó Sarcone en conferencia de prensa.
Los propietarios de la fábrica aseguraron que sus empleados tenían documentación legal y manifestaron desconocer la razón de la redada. Durante el operativo, agentes federales reunieron a los trabajadores en un comedor y les solicitaron pruebas de su estancia legal en el país.
Funcionarios demócratas criticaron la acción, calificándola como un ejemplo de la mano dura del gobierno de Donald Trump en materia de inmigración. La gobernadora Kathy Hochul señaló que la detención de padres puso “al menos a una docena de niños en riesgo de regresar de la escuela a una casa vacía”. Sarcone aseguró que las agencias de servicios sociales intervinieron y que ningún menor quedó solo en casa.
